“El año pasado publiqué un libro electrónico llamado “Estoy durmiendo siempre”, 50 mil personas se lo descargaron, lo leyó un montón de gente, había algunos que lo leían encantados, otros lo bajaban en celular y no sabían cómo abrirlos y otra gente que decía 'yo no entiendo nada de eso y quiero un libro físico.” Prácticamente describe así su inicio en el mundo de la literatura, donde iniciar es difícil, pero una vez que lo haces trasciendes en la mente de tus lectores.
A Luis Carlos Burneo lo conocí por su reconocido canal de youtube “Henry Spencer”, ese gringo que le preguntaba huevadas a los universitarios. Sin embargo, quedarse solo con esa parte de su carrera sería injusto. Siento que donde él más disfruta es en “La habitación 007”, un pequeño espacio donde entrevista a diversas personalidades. Es una bocanada de aire fresco cuando ya nos hemos acostumbrado al pseudo periodismo con sus frases trilladas como "dantesco incendio", "cristiana sepultura", "desgarrador testimonio", "protagonizó dramáticas escena de dolor", "se veía venir" o juegan con el morbo del espectador diciendo "y aquí exactamente el lugar donde XXX murió" (cortesía de El panfleto).
Era el última día de la FIL, debía ir sí o sí aunque Betsabé me haya abandonado y, como siempre, llegué a las últimas horas de terminar la feria (desventajas de vivir lejos </3). Horas antes me había enterado que Luis Carlos Burneo iba a estar allí firmando autógrafos. Agarré uno de los panfletos donde se encontraban los mapas y muy nerviosa me dirigí al stand 161 de Estación la cultura.
Me morí al verlo. No me decidía si entrar o no, y cuando lo hice me fui a la esquina. Me miraba y hacía muecas graciosas. Yo en lugar de reírme puse cara de tonta, pero cuando decidí ir a pedirle que me firme el libro y pedirle que me nos tomemos nuestra respectiva foto (ajajaja) desapareció. Todo el trayecto había sido en vano hasta que el encargado me dijo: "No te preocupes, creo que ahorita regresa. Se ha ido al baño."
Se demoró en el baño (ajajaja otra vez), pero cuando regresó ya no tuve tanta vergüenza y me firmó el libro y nos tomamos alguna fotos. Fue una experiencia corta pero ese día fue muy especial. Los otros 364 días solo lo veré a través de tu pantalla.
PREGUNTAAAAAAAAAA:
¿Has conocido a alguno de tus autores favoritos?
